Problemas para McLaren!La suerte del Mundial de F-1 pende de un hilo.
Mañana el Consejo Mundial de la FIA se reunirá en París para escuchar la defensa de McLaren en el famoso 'affaire Espionaje', más conocido como 'Coughlangate' y decidir las posibles sanciones al equipo británico y que eventualmente alcanzarían al bicampeón Fernando Alonso.
La acusación es evidente. A Mike Coughlan, ingeniero de diseño y desarrollo y por tanto personal de confianza aunque no propiamente directivo del equipo, le fue encontrado el dossier completo de un coche de la competencia.
Aunque los pilotos son la parte inocente del tema, si McLaren ha efectuado alguna de las maniobras ilegales que constan en el dossier de inculpación, es evidente que Fernando Alonso y Lewis Hamilton se habrían beneficiado –aunque fuera involuntariamente– de las mejores técnicas o ventajas tácticas de su coche y equipo.
Pero Bernie Ecclestone y el mundillo de la F-1 no quieren saber nada de perder al único campeón del mundo que actualmente está en las pistas y también a la estrella naciente de un plumazo.
Por más que Max Mosley, presidente de la FIA, sea partidario de un castigo ejemplar –entre él y Ron Dennis existe una enemistad visceral–, en el paddock de Nurburgring se daba por descontado que 'sangre' habrá pero no llegará al río y que la sanción podría trasladarse a 2008, año en el que los conocimientos sobre el adversario serían mucho más fáciles de aprovechar.
En McLaren, aunque proclaman su inocencia, comienzan a hacerse la idea de que saldrán con una sanción realmente dura: la pérdida de puntos o exclusión del campeonato de constructores. No es sólo descrédito para el equipo sino una humillación personal para Ron Dennis, que oficialmente siempre ha defendido la limpieza en el deporte y que por ello trata por igual a sus dos pilotos.
Perder 40 millones de euros
La pérdida de puntos lleva aparejada una fuerte sanción económica que no queda escrita en ningún sitio pero es evidente. McLaren sería el 'último' equipo de la clasificación de constructores y no entraría en el reparto de los beneficios de los derechos comerciales de explotación del Mundial de F-1, una cantidad que podría alcanzar los 40 millones de euros.
La defensa de McLaren ha elaborado un completo estudio que ya fue enviado a la Federación Internacional (FIA) el 20 de julio. En el mismo explican que todo el asunto se debe a la iniciativa personal de Nigel Stepney y Mike Coughlan, que querían dejar sus equipos y se ofrecieron a Honda. En esta última escudería temen que la defensa de McLaren pueda transformarse en acusación contra ellos. De hecho, los periodistas técnicos en F-1 han señalado que alguna de las últimas evoluciones seguidas por Honda parecen inspiradas por el Ferrari F2007. Aunque también se trata de cosas visibles que los técnicos hubieran podido conocer a través de fotografías hechas en pista, imágenes de TV u observando las verificaciones de los coches.
También se especula que habrían ofrecido detalles confidenciales de McLaren y Ferrari a Nick Fry, director de Honda. Éste ha admitido que se vio con ellos, pero porque éstos pidieron una entrevista para un posible fichaje