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La plantilla del Girona amenaza con un plante
Los jugadores dijeron en un comunicado estar “hartos de mentiras”, tras sufrir de nuevo retrasos en las nóminas
JUVENTANY
La plantilla y el cuerpo técnico del Girona denunciaron ayer por segunda vez esta temporada que la junta directiva no cumple con sus compromisos económicos. En diciembre, antes del último partido del año, el equipo hizo público que se les adeudaba un mes y medio de sueldo. Pasadas las fiestas de Navidad, y con el mercado de invierno abierto, varios futbolistas recibieron ofertas para cambiar de aires, aunque finalmente el club les aseguró viabilidad económica hasta final de temporada. Se pagaron las nóminas de diciembre y enero y parecía que las cosas volvían a la tranquilidad. Ayer quedó claro que no.
El capitan Jordi Dot, acompañado por el resto de la plantilla y los técnicos Raül Agné y Arnau Sala, leyó un comunicado denunciando que no han cobrado febrero y expresando su temor, ya que la próxima semana deberían cobrar marzo y lo ven complicado: “Estamos hartos de mentiras, falsas promesas... defendemos el pan de nuestros hijos y si las cosas no mejoran no descartamos medidas drásticas”, explicó el central. Aunque el retraso en el cobro es de solo 21 días, la plantilla gerundense teme que el club siga sin viabilidad económica y que la junta no pueda cumplir sus compromisos. El líder de Segunda B, virtualmente clasificado para la promoción de ascenso a Segunda A, vive una temporada revuelta y los problemas económicos pueden repercutir negativamente en la fase más importante de la temporada. “Estos chicos estan firmando una campaña excepcional, pero se entrenan gratis y nadie trabaja gratis”, dijo el entrenador Raül Agné, en solidaridad con sus futbolistas.
La directiva pide calma
El vicepresidente Ramon Vilaró lamentó el comunicado de la plantilla y quiso resaltar que “cuando pagamos diciembre y enero ya expliqué a la plantilla que se producirían algunos atrasos más. Hablamos de un retraso de 21 dias y no parece coherente su postura. Aunque vuelvo a prometerles a los jugadores y técnicos que cobrarán hasta el último euro que tienen firmado con el Girona”. Vilaró dejó claro que en breve se liquidará la deuda pero también advirtió que “si algún jugador o entrenador quiere irse tiene la puerta abierta. Le pagaremos todo y podrá ver los partidos desde la grada.