Cierto, yo no me resigno a perder la categoría. La situación actual es dramática, hacen falta muchos cambios y creo que el primero tiene que empezar por el pseudo-entrenador que nos han colocado, que ni ha servido como revulsivo, ni tiene pinta de conocer a ninguno de los jugadores que está entrenando como para hacer una alineación medianamente normal.
Pero no debemos perder la esperanza. Contra antes la perdamos los aficionados, más fácil se lo dejaremos a directiva, cuerpo técnico y jugadores, que bajarán los brazos a las primeras de cambio y empezarán a pensar en cambiar de club, quedando este año como un mero año de transición en sus trayectorias.
Desde luego, ningún jugador se romperá la cara por un club del que los aficionados parece serles indiferente irse a segunda B, asumiendo el desenlace en diciembre y callando o no acudiendo al campo hasta junio. Yo no me voy a callar, les animaré cuando a mi juicio se dejen la piel en el campo (ganen o pierdan) y me dejaré la voz para increparles el más mínimo síntoma de dejadez o falta de profesionalidad.
No somos peores que Albacete, no somos peores que Llagostera, no somos peores que Mirandés (y miradle donde está)... Sólo existe una opción, fichar a un entrenador con cara y ojos (no sé si se podría contar con Carreras a la desesperada y finiquitar al entrenador actual sin necesidad de pagarle todo el año) y exigir a los jugadores la máxima entrega dentro de un planteamiento coherente y de acuerdo con sus capacidades. Tenemos buenos jugadores, sólo hace falta recuperar a los que tenemos lesionados y situar correctamente a los que ya tenemos.
Para este 2015 sólo pido:
¡¡¡MÁXIMA IMPLICACIÓN DE TODOS LOS ESTAMENTOS DEL CLUB PARA REVERTIR LA SITUACIÓN!!!