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La UD Logroñés no acepta el plan de la RFEF para la Segunda B
Los riojanos eran líderes de su grupo y no comparten la propuesta federativa
"Es una postura improvisada. No queremos un cambio de reglas", dijo Juanjo Guerreros, gerente.
La Unión Deportiva Logroñés, el club que más puntos sumaba de todos los grupos de Segunda B cuando se suspendieron las competiciones, no comparte la propuesta de la Federación Española de Fútbol para resolver las ligas catalogadas como no profesionales y considera que, en concreto, supone "degradar" su actual categoría.
Así lo ha explicado a EFE el gerente del club, Juanjo Guerreros, después de que ayer la Federación plantease terminar las ligas no profesionales (Segunda B, Tercera y las ligas femeninas) con una eliminatoria a partido único para decidir los ascensos y con la posibilidad de que no hubiera descensos.
"Estamos absolutamente en contra de ese planteamiento y de una postura que se toma de forma improvisada, sin dar detalles concretos y de forma totalmente extemporánea en la situación en la que está el país", ha considerado.
Reconoce que "es normal" que la Federación "tenga un Plan B" pero cree que "ciertas decisiones habría que tomarlas si no puede haber fútbol el 30 de mayo, no ahora, cuando estamos a mediados de abril".
En cualquier caso cree que "la competición debe terminar y si ha empezado con unas normas, debe acabar con las mismas". Si hay "un cambio de reglas" cree que "se podría determinar que el que estaba primero en cada grupo ascendiera ya a Segunda, porque cualquier otra cosa es penalizar a equipos que lo han hecho bien", ha planteado.
La UD Logroñés lideraba el Grupo II con 62 puntos, más que ningún otro conjunto de Segunda B y, a falta de 30 puntos por disputar, aventajaba en 13 al segundo clasificado.
"Otra solución podría ser crear para el año próximo una categoría puente hacia el fútbol profesional, con veinte equipos, por ejemplo" pero "lo que no tiene sentido es plantear ahora ampliar la Segunda B para el año que viene, cuando llevamos años trabajando para reducirla de los 80 equipos que tiene".
Juanjo Guerreros cree que "pensar en Segunda B, donde prácticamente todos los jugadores son profesionales, con más de 90 equipos sería degradar la categoría por completo" cuando "llevamos años trabajando para mejorarla y que sea profesional de verdad".
No obstante, Guerreros, que es miembro de la Comisión de Segunda B de la RFEF, ha admitido que su planteamiento puede chocar "con el de más equipos en número" que "estén más preocupados de no descender que de otra cosa".
