Lo que me resulta un auténtico Expediente X es cómo, habiéndose recuperado al equipo como se recuperó, en la jornada 28, y con tantos partidos por delante para acabar bien, el equipo se ha vuelto a desplomar como un castillo de arena...
No lo entiendo y no encuentro una explicación. No sé si tiene que ver que, habiendo hecho lo más difícil uno se envalentona y empieza a querer inventar demasiadas cosas, si nos quitamos de encima a los jugadores equivocados (el que tenía que haber salido era Manel y no Cristian Herrera) o un tema físico (que casi descarto porque un 2-0 en el descanso no tendría mucho sentido que fuera por una cuestión física).
Sólo espero que está semana sirva para reflexionar a jugadores y cuerpo técnico, se conjuren, cojan confianza y recuperemos ese espíritu que nos hizo ser, por unos partidos, uno de los mejores equipos de la tabla.
HONOR!